Es muy común que un régimen de vistas que se ha realizado sin problemas durante años, al llegar la adolescencia se haga difícil de cumplir.
Son muchos los hijos que al llegar a la adolescencia se niegan a cumplir con el régimen de visitas establecido en sentencia. Ante estos casos, la posición de los jueces no es unánime. En algunos casos los jueces entienden que no es aceptable dejar en manos de los menores la decisión de relacionarse con el progenitor no custodio y por tanto debe cumplirse el régimen de visitas establecido en sentencia. En otros casos, y ante la concurrencia de circunstancias especiales, algunas Audiencias han considerado que no debía imponerse a los hijos adolescentes un régimen de visitas por entender que podría incluso ser contraproducente para fomentar la relación con el progenitor no custodio.
La solución pasa por analizar cada caso en concreto, abordarlo de manera cuidadosa y tener en cuenta en estos casos que la negativa de los hijos adolescentes a cumplir con el régimen de visitas establecido en sentencia puede traer consecuencias negativas para los progenitores.
No solo puede significar un incumplimiento para el progenitor no custodio, sino que también puede exponer al progenitor custodio a ser condenado penalmente por desobedencia a la autoridad. En este caso el progenitor custodio deberá acreditar ausencia de dolo o voluntad de incumplir.
En resumen, se trata de un asunto delicado, y habrá que analizar cada caso en concreto sin que se pueda llegar a una solución generalizada
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